Placer y deseo a través de la memoria y la intimidad de tres mujeres mayores de 65 años. Criadas en una época represiva donde la sexualidad era tabú, Ana, Patricia y Mayela comprendieron la feminidad basada en reglas tácitas e imposiciones implícitas. Ahora, sus intrépidas voces se encarnan en una sola mujer de 65 años, que revisita una vida caleidoscópica de recuerdos, secretos y deseos ocultos entrelazados. El film desde el inicio revela su estructura y sus juegos para hacer visible el deseo de las mujeres adultas mayores, para revelarlas como agentes activos de su sexualidad y disfrute. Los recuerdos, secretos y anhelos de las tres se entrelazan de forma poética: mientras las mujeres cuentan sus historias fuera de la pantalla, llenan el cuerpo de otra mujer de su generación que encarna sus vidas. Ahora se atreven a hablar de ello abiertamente.
Y ha habido elogios. Para el argentino Diego Lerer, de MicropsiaCine.com “la ingeniosa y compleja estructura formal de Memorias de un cuerpo que arde enlaza la vida de tres mujeres en una sola historia, mezclando documental, ficción y reconstrucción de una manera original y bastante fluida”. Según Robert Daniels, de rogerebert.com “lo más gratificante de la película de Furniss es oír a estas mujeres hablar de la libertad -sexual o de otro tipo- que han encontrado en la madurez. Todas parecen seguras de sí mismas, desafiantes y sabias”*. Alan Hunter, en Screendaly, alude a “un relato elegantemente estructurado destila las experiencias de tres mujeres mayores en una sola vida que habla por una generación”. Giorgia Del Don, de Cineuropa, opina por su parte que “inteligentes, resistentes e increíblemente sinceras, las voces que protagonizan esta película nos demuestran que nunca es demasiado tarde para reinventarnos y retomar por fin las riendas de nuestro destino”. Diego Batlle en OtrosCines considera que el film es “un bello y sensible trabajo sobre la sororidad y el empoderamiento de mujeres que han callado y aceptado los mandatos durante demasiado tiempo y ahora, finalmente, tienen la oportunidad de exponer sus verdades”.
El film fue distinguido con el 26º Premio Panorama del Público al mejor largometraje en esa sección de la Berlinale. Mención especial del jurado ACCU del 42º Festival Cinematográfico Internacional del Uruguay.