Reino Unido, 1972
Dirección: Alfred Hitchcock
Con Jon Finch, Barry Foster, Alec McCowen.
Duración: 116 minutos
Hitch regresó a su natal Inglaterra para rodar su penúltima película, su última obra maestra y su última historia de un falso culpable. Thriller con algún ocasional toque de horror, un protagonista que hace todo lo posible para que lo acusen de un crimen que no cometió, y un asesino psicópata debidamente encantador con madre insoportable. Todo muy hitchcockiano.