Alguien ha señalado ya que esta película supone un giro en la carrera del director y guionista griego Lanthimos (Canino, Alps, Langosta, El sacrificio de un ciervo sagrado) quien abandona aquí el particular estilo opresivo, asfixiante y opaco que caracterizó varias de esas películas anteriores para desarrollar una sátira política en la corte de la reina Ana de Inglaterra.

La película transita los entretelones de la corte inglesa del Siglo XVIII, cuando en plena Guerra con Francia, la reina Ana (estupendamente interpretada por Olivia Colman) tiene que lidiar con sus males físicos y psicológicos que estorban su actividad de gobernante. Su principal apoyo es su amiga Lady Sarah (la también excelente Rachel Weisz) con quien emprende una relación entrañable. Tercera en discordia: Abigail (Emma Stone), parienta de Sarah, quien se convierte en el tercer vértice de un juego por el poder absoluto.

Provocación, lujuria y manipulación son los nombres de ese juego, que incluye varios sarcasmos a costa del sexo masculino y una perversa celebración del poder de la mujer, y que Lanthimos envuelve en una exquisitez formal que ha hecho pensar a más de uno en el Barry Lyndon de Kubrick. Una de sus virtudes es su negativa a sermonear: la película exhibe crueldades, decadencia y pero sobre todo ridículo, pero deja que el espectador sea quien saque las conclusiones, aunque se le ha reprochado cierta ambigüedad al final, que quizás no sea un defecto sino una negativa a caer en lo obvio.

En El Periódico de España, NandoSalvá ha dicho que La favorita es “la película más compleja de Lanthimos y posiblemente también la mejor (...) Vuelve a demostrar su capacidad única para provocarnos la risa y hacernos polvo en el transcurso de una misma escena. "Sergi Sánchez en La Razón define a la película como una "abrumadora lección de cine (...) Es apasionante cómo Lanthimos abandona progresivamente cualquier floritura formal para dedicarse, desde el más hilarante fatalismo, a contemplar cómo esas tres mujeres se destruyen y se reconstruyen" Olivia Colman obtuvo un Globo de Oro como mejor actriz (ya había sido premiada en Venecia y Gijón) por su composición de la soberana, pero el premio pudo ir igualmente para cualquiera de sus dos compañeras de elenco, y no es difícil apostar que la película va a figurar en la inminente grilla de candidatas al Oscar, valga eso lo que valga. También tiene doce nominaciones a los BAFTA y catorce a los Critic’s Choice Awards, premios que aún no se han discernido mientras se escriben estas líneas, y galardones o nominaciones adicionales de otra veintena de festivales e instituciones. No es fácil pasarla por alto.