Esta película documental explora el emblemático Palacio Salvo en Montevideo, que en 1928 era el edificio más alto de América del Sur. La película revela la vida dentro del Palacio, inspirado en La Divina Comedia de Dante Alighieri, mostrando cómo los habitantes tejen sus vidas en una alegoría de lo eterno y lo efímero. Único Monumento Histórico Nacional habitable e ícono que identifica a la ciudad de Montevideo, el Palacio opera como una suerte de escenario metafísico. Sus habitantes e historias se transforman en una simbología de la existencia, de la esencia del ser y sus pilares, invitando al espectador a transitar caminos posibles, y a componer en clave de luna, una sinfonía de la vida.
Reunidos en el Palacio Salvo, personas comunes construyen su día a día con frustraciones, logros y anhelos. Historias presentes, cotidianas, que ilustran la vida actual en el edificio y nos acercan por diferentes caminos a este estudio y búsqueda de la esencia del ser humano.
La productora, directora y libretista de La embajada de la luna, Patricia Méndez Fadol, nació en México D.F. en 1980. Realizadora audiovisual, con 19 años de experiencia en el medio. Titulada con dos votos de distinción de la Escuela de Comunicación Audiovisual DUOC.UC., Santiago, Chile 2004. En el año 2009 crea en Montevideo, Uruguay, la productora Mefafilms. Desde entonces, ha realizado más de trescientas piezas audiovisuales de carácter institucional, cultural, educativo y publicitario, como directora, productora, camarógrafa y editora (2009-2024). Su empresa Mefafilms se autodefine como una productora audiovisual, enfocada en crear contenidos con fines culturales y educativos que generen un impacto positivo en la sociedad.
Esta incursión en el fascinante universo del Palacio Salvo, ese rincón de los misterios (si solo una cuarta parte de lo que se cuenta por ahí de él fuera cierto ya sería un lugar intrigante) es un adecuado ejemplo de su manera de trabajar.