Yu regresa a su ciudad natal en la isla de Hainan después de pasar diez años en prisión y trata de reavivar su relación con su antigua amante, Hong. El plan de Hong de comprar un apartamento los enfrenta con algunas dificultades, pero su tenaz perseverancia les da fuerzas para seguir adelante con sus vidas y compensar la ausencia del otro.
La decisión de Hong de casarse se debe en parte a sus esfuerzos por encontrar una vivienda estable para su hija antes de que empiece la escuela. Casarse con un local es un atajo para conseguir un lugar, pero la conexión de Yu con un promotor inmobiliario resulta ser una complicación. A través de esta subtrama, Wu ofrece un comentario perspicaz sobre los innumerables proyectos de vivienda que han llegado a dominar rápidamente el paisaje urbano de Hainan. Este centro urbano en el sur de China es la isla más poblada del país, y la representación de Wu acierta en capturar ese aspecto de hacinamiento. Las imágenes de rascacielos intimidantes se ven por todas partes en la película, desde fotos publicitarias en las puertas de los ascensores hasta los paisajes que parecen perpetuamente fuera del alcance de los personajes.
Ausencia describe a Hainan como una gigantesca obra en construcción cuyo triste estado dista mucho de la promesa de comodidad y lujo utilizada para atraer a nuevos compradores. Las estructuras incompletas, los promotores inmobiliarios poco fiables y las exigencias financieras interminables hacen que el sueño de poseer una casa sea casi imposible para personas como Hong, incluso después de gastar los ahorros de toda su vida en un apartamento en uno de los innumerables edificios altos en construcción.
La inadecuación de la planificación urbana hace que Hainan se convierta en una ciudad fantasma paradójica, donde cientos de edificios a medio construir y desocupados coexisten con millones de personas que necesitan desesperadamente una vivienda. Wu hace sus observaciones sobre la ciudad recurriendo a imágenes inquietantes de espacios deshabitados. A cierta altura cambia de marcha y se convierte en una representación muy estilizada de la decadencia urbana.
Hay algo conmovedor en la forma en que Yu intenta encontrar algo orgánico o vivo en medio de todo el hormigón abandonado que lo rodea. Situada en el contexto histórico de una China lanzada en una desenfrenada carrera capitalista, este primer largometraje de Wu Lang, parte del melodrama para dirigirse decididamente hacia la historia de dos amantes sin futuro. Wu Lang no esconde sus guiños al cine de Jia Zhang-ke y Wong Kar-wai mientras esboza su propia idea del cine: melodrama, comentario social y estilización visual en partes iguales, para un promisorio debut.
El director Wu Lang nació en China en 1991. Tras licenciarse en Escultura, se ha dedicado
activamente a la docencia, el documental y la publicidad. En 2021, su cortometraje Absence fue nominado a Mejor Cortometraje en el 74º Festival Internacional de Cine de Cannes y en el 33º Festival Internacional de Cine de Palm Springs, y ganó el premio a Mejor Cortometraje en el 22º Festival Internacional de Cine de Milán. Este largometraje es una versión corregida y aumentada de ese corto homónimo previo.