Nina y Emma son dos amigas que emprenden sus primeras vacaciones de verano solas. Entre tardes de playa, noches de fiesta y búsquedas personales se sumergen, sin darse cuenta, en una nueva etapa de su vida. El balneario se convierte en el escenario ideal para esta transición. Cuando Emma empieza a salir con alguien que conoce en una de esas noches de verano, el vínculo entre las amigas cambia, quizás para siempre. La dinámica entre las dos amigas se ve sacudida y Nina atravesará un período de profundos cuestionamientos.
El film muestra la lucha interna de cada una de ellas por encontrar su lugar en el mundo, lo que las hace sentir vivas y felices. La película invita al espectador a reflexionar sobre sus propias búsquedas y cuestionamientos, conectando con la esencia misma de la vida y la experiencia humana.
Nacida en 1995 en Montevideo, la directora debutante Mercedes Cosco es fotógrafa, escritora y realizadora audiovisual. Su trabajo artístico se centra en la intersección entre la fotografía y la escritura, así como en la exploración de los formatos autobiográficos y autoficcionales. Coordina talleres de narrativa personal y ha trabajado con escuelas de Uruguay, Argentina y España. Nina y Emma es su ópera prima como guionista y directora.
La cineasta explica así el proceso de creación del film: “Nina & Emma es mi primera película… Fue escrita durante 2017 y 2018; y halló en 2020 su posibilidad de realización. A nivel narrativo, y a modo de tejido artístico, en la película se ven reflejados los mismos temas que en el resto de mi obra: el miedo ante lo incierto, las crisis de ansiedad, la identidad sexual, el deseo, la juventud, la búsqueda de la plenitud, el éxtasis. Todo forma parte del mismo universo creativo. Todo es lo mismo. Todo es lo mismo. Todo es lo mismo”.
La historia de la película, la trama, surge como un primer acercamiento de Mercedes a escribir un largometraje. “Tenía muchas ganas de hablar de la amistad y de la amistad de dos mujeres, como punto de partida. Después, quise incorporar elementos que me parecían interesantes y se fueron dando a medida que se construyeron esos personajes”, recuerda Cosco. Hoy Nina y Emma es una película que está ahí, en la pantalla, para disfrute, reflexión y provocación al espectador.