Bastien, un adolescente parisino, va a pasar las vacaciones con su familia a una cabaña junto a un lago en Quebec. Allí se encontrará con Chloé, una chica mayor, de quien se enamorará. A pesar de la diferencia de edad y de los miedos de Bastien, desarrollarán un vínculo especial. Bastien tendrá que enfrentarse a sus miedos para conseguir un lugar en el corazón de Chloé, mientras exploran su sexualidad y la inquietante leyenda del fantasma del lago. Hay un matiz fantástico en la historia, asociado a leyendas sobre el lago con ahogados y desaparecidos. Chloé las conoce y no duda en utilizarlas como hilos imaginarios que añadir a sus propias fantasías de adolescente.
La película subraya estos rasgos con imágenes de los caminos intrincados del bosque que rodean la casa, del agua superficial del lago como lugar un tanto tenebroso, o de ciertos juegos de los jóvenes en los que se usan sábanas y máscaras típicas de las fiestas de fantasmas. El film fue rodado en celuloide, en 16mm, lo que le proporciona a la imagen un grano “más denso y sensual”, según describe Le Bon.
La película, fundamentalmente, es una historia de iniciación adolescente en un verano de libertad, de fiestas, de relajación de las obligaciones del largo invierno, donde los padres están en lo suyo y no tan pendientes de si sus hijos beben o fuman. Esta es la parte más lograda de la película y su mejor acierto, al trazar un retrato verosímil de la relación de Bastien y Chloé, de sus vicisitudes, del amor que surge en el chico y de su admiración por una chica compleja con más experiencia que él.
Charlotte Le Bon creció en Quebec antes de mudarse a París. Trabajó como actriz con directores de la talla de Michel Gondry y Jalil Lespert. En Estados Unidos actuó en films de Lasse Hallström, Robert Zemeckis y Sean Ellis. Es una artista que explora su gusto por la extrañeza a través de la pintura, el dibujo y la litografía. Su pasión por los films de género la llevó a escribir y dirigir Judith Hotel, un corto que se presentó en la edición de 2018 del festival de Cannes. Falcon Lake es su primer largometraje.