Alcira Soust Scaffo es la poeta uruguaya que se convirtió en mito al resistir escondida en un baño durante los 12 días que el ejército mexicano ocupó la UNAM (Universidad Nacional Autónoma de México) en 1968. Una mujer que osciló entre el delirio y la cordura, entre azoteas, árboles y casas de Uruguay y de México, su país de adopción. Allí se convirtió en leyenda y aquí en un misterio. A través de sus cartas y poemas, así como de las huellas que fue dejando en familiares y amigos, esta película busca conocer a la persona detrás del mito. Una poeta olvidada e inolvidable.
Alcira falleció en Montevideo en 1997. En 2008 comenzó la película con una entrevista del sobrino nieto de Alcira y director de la película, Agustín Fernández, a su abuela, hermana de la poeta. Tras 10 años de investigación, en 2018, su sobrino Agustín Fernández, tras contactar con mucha gente que la había conocido, viajó a México para completar la historia mexicana de la poeta. “Fue andar los caminos de Alcira, desde sus inicios como maestra en Pátzcuaro, Michoacán, y en los pasillos de la UNAM, que fue su casa. Fue muy especial que al llegar me dijeran: ‘Mira, esa araucaria la plantó ella y abajo están los ombligos de los hijos de sus amigas’, o ver afuera de la Facultad de Psicología la jacaranda enorme que también sembró con otros amigos”. El cineasta agregó: “Me quedé muy sorprendido por todo lo que se le recuerda y se le aprecia, sobre todo el dolor que les causó que Alcira se haya regresado a Uruguay, porque la suya no es una historia color de rosa. La investigación y el rodaje me llevó a conocerla más, pues la última vez que la vi yo tenía 11 años y ella era un mito familiar”
Alcira y el campo de espigas es la ópera prima como director de Agustín Fernández
Gabard (Montevideo, 1982). Con formación en fotografía, periodismo y derechos humanos,
ha trabajado para diversos medios de prensa y ongs a nivel local e internacional. Ha
realizado diversas exposiciones e intervenciones urbanas. Publicó el libro ¡Hasta Borinquen! junto al periodista Diego Recoba. Han tenido especial repercusión sus trabajos para madres y familiares de uruguayos detenidos desaparecidos, su exposición sobre la Comunidad de Paz de San José de Apartadó (Colombia), con colaboración de Noam Chomsky, y más recientemente su exposición/instalación Dejar la violencia machista sobre el programa de la Intendencia de Montevideo de atención a hombres que deciden dejar de ejercer violencia.
El crítico Enric Albero de El Cultural destacó sobre el film que: “las entrevistas y el material de archivo, combinados con los poemas de la escritora, se suceden con ritmo ágil (...) Fernández maneja con habilidad el archivo y gestiona con la pericia de un pulcro autor de novelas de misterio un giro de guión”. Premio del público en el 41 Festival Cinematográfico Internacional del Uruguay.